POR QUÉ, AL SOBREPROTEGERTE, TUS PADRES TE ACABARON CONVIRTIENDO EN UNA PERSONA DÉBIL ANTE LAS ADVERSIDADES

Seguro que muchas veces te has comparado con los niños de otras épocas y te has dado cuenta de que, si hubieras nacido unos años antes, seguramente no habrías sobrevivido: Tus padres iban y venían solos al colegio, se hacían la comida, cuidaban a sus hermanos pequeños como si de sus hijos se tratara; mientras que tus abuelos vivieron una época de posguerra, han visto morir a muchas personas a su lado y se han recuperado de enfermedades que, de padecerlas, hoy en día nos parecerían mortales.

Evidentemente, es difícil imaginarse una sociedad diferente a la actual, al igual que hace 20 años nadie habría dicho que sería posible hacer una videollamada a 3.000 kilómetros de distancia, de forma gratuita, y con un teléfono móvil en el que la pantalla cada vez es más grande.

No obstante, es verdad que, en la actualidad, y fundamentalmente a las niñas, se las sobreprotege de sobremanera, creando en ellas un temor infundado, una necesidad de buscar siempre a alguien que las ampare y una incapacidad para afrontar los problemas por sí mismas. Porque, a lo mejor, quizás te veas reflejada en alguna de las consecuencias que tiene este tipo de actitud por parte de los padres:

1. Sientes que todas tus decisiones tienen que ser aprobadas por alguien más, comunicándolas y debatiéndolas sin pensar en si realmente es lo que quieres o no.

Que te quieres comprar un vestido para una boda, que te quieres ir a vivir a otra ciudad, que te gustaría cambiar de trabajo, que te encantaría salir a cenar esta noche con tu novio… Todo lo comentas con tus padres (o con quien sea), los haces partícipes de ello, buscando que aprueben tu actuación, buscando que no pongan muchas pegas, y llegando a plantearte no hacerlo si no se muestran del todo conformes.

2. Buscas siempre sentirte protegida

En realidad, como siempre te han protegido, sientes que cuando no lo hacen eres vulnerable, te falta un escudo que te haga sentir segura… Y, si no te protegen ellos, buscas sentirte respaldada por tus compañeros de piso, tus amigos o tu pareja. Eso sí, nunca sentirte sola, porque eso no está hecho para ti.

3. Tienes temores infundados

Desde pequeña te han dicho “no pases por ese callejón oscuro”, “no andes sola por la ciudad de noche”, “si te encuentras a un chico solo por la calle y te mira, ten cuidado”, “no aparques el coche en parkings subterráneos”… Y un sinfín más de tonterías que te han llevado a ser una auténtica paranoica, a vivir con un miedo sin sentido y a preocuparte por cosas que no tiene sentido hacerlo.

4. Te cuesta mucho más enfrentar una vida por ti misma

Parece complicado entender que seas capaz de hacerlo todo por ti sola: Independizarte, cocinar, ordenar tu casa, tener un trabajo que te guste, viajar tú sola, pasar una noche sola en casa si tu pareja está trabajando fuera… Cuando, lo mires por donde lo mires, es algo de lo más normal.

5. Eres una más de esa juventud débil mental que la sociedad ha creado

Cada dificultad, cada problema, cada tropezón… Es una oportunidad para mejorar, para sacar la mejor versión de ti misma, para aprender de ti. Sin embargo, si te han sobreprotegido, no te han dejado tener que enfrentarte a ciertas situaciones, las han solucionado para que tú no tuvieras que hacerlo… De modo que, cuando llega el día en el que te tengas que enfrentar tú sola, lo más probable es que esa situación te supere, y no entiendas que el fracaso siempre tiene una moraleja que sirve y mucho.

No obstante, si te has sentido identificada con alguna de las consecuencias de haber sufrido esta sobreprotección desde la infancia, no tienes por qué alarmarte. En primer lugar, porque no es tu culpa, y no tiene sentido preocuparse por algo que no depende de nosotros. Es consecuencia de la educación que querían darnos nuestros padres, y lo hicieron con la mejor de sus intenciones. Y, en segundo lugar, porque nunca es tarde para buscar la mejor versión de ti misma, así que ponte manos a la obra y no olvides que, enfrentándote a ellos, es la mejor manera de superar todos y cada uno de tus miedos y debilidades.